Ocho destinos a los que viajaríamos solo por su comida

Cualquier buen viajero sabe que la comida es un eje central del itinerario. Si tú como nosotros pasas buena parte de tu tiempo buscando qué comer —e incluso haces tus reservas con meses de anticipación—, entonces no te cansarás de los siguientes destinos.

1. Japón

Tokio es la ciudad con más estrellas Michelin del mundo y Kioto y Osaka no se quedan atrás. Desde comer en los mercados (como en los alrededores de lo que era el mercado de pescado de Tsujiki) y en los puestos comida callejera, hasta en lugares de renombre internacional, como el sushi de Sukiyabashi Jiro. Simplemente es una experiencia gastronómica inigualable en todos los niveles: carnes, pescados, pastas y postres como nunca los habías probado.

2. Turquía

En cuanto a comida se refiere, hay mucho por explorar en este destino: empezando por las botanas, que siempre vienen acompañadas por dips impresionantes. Siguiendo con las entradas, siendo el hojaldre su máxima expresión. Para plato fuerte, encontrarás carnes, como el kebab en sus distintas variantes, y los pescados en las zonas cercanas al mar. Para terminar con los postres, que no escatiman en frutos secos y miel.

3. España

Norte, sur, este, oeste, adonde apunte el mapa encontrarás delicias imposibles de replicar en otros países por una simple razón: las materias primas: Donostia tiene sin lugar a dudas los mejores mariscos y pinxos (además de varios lugares con estrella Michelin), mientras que Huelva es la cuna del mejor jamón serrano del mundo. Valencia, por su parte, es el lugar para comer paella. Para delicias dulces: Toledo y Alicante.

4. México

Incluso siendo mexicano, la comida es un pretexto para visitar otros estados de la república, como Oaxaca, Veracruz, Baja California o Yucatán. Por supuesto, las principales ciudades del país también conglomeran una buena cantidad de restaurantes que han llamado la atención de forma internacional, como lo son Pujol en la Ciudad de México, Pangea en la ciudad de Monterrey y Alcalde en la ciudad de Guadalajara, entre otros.

5. Tailandia

De nuevo otro país donde la comida es igual de deliciosa al aire libre que a puerta cerrada. Bangkok es el epicentro culinario, tanto por por su famosa cultura de la comida callejera como por sus restaurantes que la reinterpretan de forma ingeniosa, como lo es Nahm. Entre sopas, currys y pastas condimentadas con elementos pocos comunes en la cocina occidental (como coco, papaya, hierba de limón) tus papilas gustativas descubrirán nuevos horizontes.

6. Italia

Una elección un tanto obvia, pero no podía faltar en esta lista. Después de todo: aquí se encuentra el mejor restaurante del mundo, Osteria Francescana de Massimo Botura en la ciudad de Modena. Pero las pizzas de Nápoles, las pastas de Boloña, los bisteces de Florencia. Por no hablar de los vinos, los quesos, los embutidos, los tiramisús… cada ciudad es un pretexto nuevo para postergar la dieta hasta el regreso.

7. Perú

Mucha gente podría prescindir de visitar la capital peruana si no fuera por su comida. Sin embargo, no hay gastronomía como la de Lima: desde la comida fusión peruana y china (chifa), hasta la fusión peruana y japonesa (nikkei) y las reinterpretaciones modernas de la cocina local. Sin embargo, en otras zonas del país se come igual de bien: la comida Amazónica ofrece ingredientes y pescados únicos, mientras que la de los Andes retoma técnicas antiguas de cocción como es la pachamanca.

8. India

En este país no existe nada que regule el uso y abuso de las especias excepto el buen sabor y la sazón de quien prepara el platillo. Si bien Delhi, como buena capital, tiene una interesante escena gastronómica, cada comunidad tiene sus propias recetas, especias y técnicas. Una buena forma de probar distintos preparados es pedir un thali: una bandeja con varios guisados que van acompañados de pan.