10 museos del mundo por los que viajaríamos
Para viajar razones sobran, y museos también. Entre corredores secretos y colecciones sin comparación, nos dimos a la tarea de elegir diez poderosos motivos llenos de arte para que compres ese boleto de avión de una vez por todas.
Museo Europeo de Arte Moderno
No necesitas pretextos para visitar Barcelona, pero este es uno muy valioso. Ubicado en el corazón del barrio del Born, a un costado del Museo Picasso, está dentro de un hermoso edificio, donde antiguamente estaba el Palacio Gomis, que fue reconstruido en 1792. Se define como un “museo vivo” porque no sólo hay exposiciones, sino también conciertos, teatro, cursos de pintura, escultura y talleres para niños. Una experiencia sensorial única que te enamora por completo del lugar.
Museo de Historia Natural de Nueva York
Además de las visitas obligadas al Met y al MoMa, este museo resulta en diversión garantizada para toda la familia, sin importar las edades. Quienes hayan ido sabrán que es una experiencia interactiva y reveladora que muestra de manera muy entretenida todo lo que en la escuela no te enseñan (o ya se te olvidó) sobre el universo, la flora y la fauna, los ecosistemas y nuestro origen como especie. No hay otro en el mundo como este.
Museo Nacional de Antropología de México
Considerado uno de los museos más importantes a nivel mundial y el más grande de México, reúne casi todo sobre los grupos indígenas y las culturas prehispánicas de la región, además de ser anfitrión de exposiciones importantes que dan la vuelta al mundo. Además, está ubicado en un edificio icónico de la Ciudad de México realizado por el famoso arquitecto Pedro Ramírez Vázquez. Un acervo histórico imprescindible al que sólo le falta el penacho de Moctezuma original.
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y Museo Nacional del Prado
Qué decir de este combo. El primero te roba el aliento apenas pones un pie adentro. Basta con saber que te encontrarás cara a cara con el Guernica de Picasso para ser una razón de peso suficiente para visitarlo, pero el resto de sus exposiciones siempre están a la altura. Lo mismo pasa con el Museo Nacional del Prado, donde Las meninas se roban el espectáculo junto al Coloso y al Jardín de las delicias de El Bosco.
Galería Uffizi
Italia entera es un museo, pero como sólo podemos elegir uno entonces nos vamos por la colección de la familia Médici, una de las más antiguas y famosas del mundo. Además tiene un corredor secreto, el Corredor Vasari, que se conecta con el Puente Veccio y al que casi nadie tiene acceso, donde se resguarda otra parte importante de la colección. Cuenta la leyenda que Hitler sabía de la existencia de las obras resguardadas en esta parte y por eso ordenó que fuera lo único que no se debía bombardear. Sabía que ahí hay hasta un Siqueiros.
Museo de Louvre París
Como si París no fuera motivo suficiente por sí solo, es anfitrión de uno de los museos más impresionantes del mundo. La colección es cortesía de la monarquía francesa, de los representantes de la ilustración y de coleccionistas independientes, quienes acumularon entre todos hasta 445,000 piezas. Por eso, hoy en día es uno de los acervos históricos más importantes del mundo. Se pueden ver algunas de las obras maestras del arte universal, como La Gioconda, la Virgen del canciller Rolin, La encajera, La coronación de Napoleón y La libertad guiando al pueblo.
Tretyakov Gallery
Sabemos que el Museo Hermitage, en San Petersburgo, es un must por el edificio en el que está, pero la colección del Tretyakov Gallery es tan poderosa que elegimos mejor el lugar donde se puede apreciar la Composición VII de Kandinsky junto a más de 180,000 obras. Una explosión de talento ruso antiguo y contemporáneo que deja con la boca abierta.
Institute of Art de Chicago
Esta ciudad es una de las favoritas, entre muchas otras cosas, por este lugar. Además de ser una escuela de artes de gran renombre, reúne una gran colección de arte clásico y contemporáneo entre la que destacan artistas como Hopper, Andy Warhol, Van Gogh, Grant Wood, Picasso, Seurat, Monet, Magritte, Renoir y la lista sigue y sigue. Cada sala es una sorpresa. Un lugar del que uno sale con ganas de ser artista.
Museo Nacional de Ámsterdam
Un excelente pretexto para visitar esta ciudad tan excéntrica, original, mágica y también clásica, es el Rijksmuseum. Dedicado al arte, la artesanía y la historia principalmente de los Países Bajos, posee una importante colección de pinturas del Siglo de Oro. Entre sus principales exponentes están Rembrandt, Peter Paul Rubens, Francisco de Goya, Frans Hals y Johannes Vermeer, además de que el edificio es espectacular.
Museo Británico
El impresionante conjunto de piezas que reúne este museo van desde Egipto y Persia hasta reliquias mayas. Un recorrido invaluable por el mundo antiguo, que logra transportarte a esos lugares y a Roma y Grecia antigua, por ejemplo. Aunque es más un museo etnológico y arqueológico, también cuenta con importantes piezas artísticas de Miguel Ángel, Rembrandt, Goya y una colección de Durero, entre otras cosas.
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